Las mejores y más luminosas luces

Estar en la sección de lámparas de una tienda enfrente de filas de focos LED, CFL y halógenos, con términos tales como “lumen”, “reproducción cromática” y “temperatura Kelvin” es suficiente para hacerte añorar la época de los viejos focos incandescentes. Sin representante de ventas a la vista, sólo puedes esperar tener la suerte de que pase otro comprador y que resulte ser ingeniero eléctrico o un científico espacial. Pero generalmente estás solo rodeado de muchos focos.

Sin embargo, una vez que logras decodificar los términos, no son tan intimidantes y podrás concentrarte en lo que realmente importa: Cuánto estás dispuesto a gastar y qué tan luminoso necesita ser el foco. (Para aclarar los términos crípticos, consulta “El lenguaje de la luz”).

Los LED acaparan la mayor parte de la atención últimamente, así como los primeros lugares en nuestras Calificaciones. Los fabricantes siguen invirtiendo en el desarrollo de LED y esos focos se han convertido en dispositivos electrónicos sofisticados. Pero son caros. Por el precio, sin embargo, puedes esperar un foco que dure 23 años o más.

Los CFL también han mejorado. Los mejores se encienden rápidamente al máximo y brindan mucha luminosidad. También se dañan menos al prenderlos y apagarlos con frecuencia en comparación con las versiones anteriores. Los CFL son mucho más baratos que los LED y pueden durar entre 7 y 10 años. Sin embargo, aunque los CFL sean mucho mejores de lo que eran hace una década, los mejores no son tan buenos como los LED de mayor calificación. (Ve la “La batalla los focos”, más adelante).

Hay una tercera opción: Los bulbos halógenos. Son una clase de foco incandescente que se encienden en forma instantánea, pueden atenuarse y algunos cuestan menos de $2. Pero utilizan mucho más energía que los LED y los CFL. Algunos tienen un filtro de color que mejora el color de la luz, pero también reducen la producción de luz. Y generalmente sólo duran alrededor de uno o dos años, así que vas a tener que volver mucho más pronto al pasillo de los focos en la tienda.

Aunque no tienen el mismo aspecto, todos estos LED son para uso en lámparas y reemplazan un incandescente de 60 o 75 vatios. Los fabricantes están introduciendo varias formas para mejorar la eficiencia y distribución de luz, ayudar a controlar el calor y reducir costos. Los Feit y Philips tuvieron buenos resultados en nuestras pruebas; el Nanoleaf no. Estamos probando los otros.

Aspecto de la luz
Las diferencias de color son fáciles de ver. La luz cálida amarilla, similar a la de una incandescente, tiene una temperatura de color de alrededor de 2700K. (La K es por Kelvin, una escala de temperatura que mide la temperatura de color). La mayoría de los focos  calificados de Energy Star están dentro de un rango de 2700K a 3000K. Los focos de entre 3500K y 4100K brindan una luz más blanca y los de entre 5000K y 6500K proveen una luz blanca más azulada.

Energía utilizada
Los vatios te dicen cuánta energía utiliza la lámpara. Un LED de 10 vatios que brinda la misma luz que un incandescente de 60 vatios te ahorra energía y dinero.

Lumens
Cuanto más lumen, más brillante el foco (piensa en “luminosa”), pero muchos de nosotros aún pensamos en términos de vatios. Para focos utilizadas en lámparas y dispositivos de techo, conocidos como de tipo A, 800 lumens brindan luz tan fuerte como un incandescente de 60 vatios; un foco de 1,100 lumens reemplaza uno de 75 vatios; y 1,600 lumens brindan tanta luz como un foco de 100 vatios.

Vida útil
A diferencia de otros focos, los LED generalmente no se queman, sino que la luz se atenúa con el tiempo y se consideran útiles hasta que se reduce en un 30%. Esa es la vida útil que verás en la etiqueta.

En algunas cajas podrías ver los siguientes términos

Omnidireccional
Los LED brindan luz sólo en una dirección específica, salvo que se haya utilizado ingeniería avanzada para diseñar los focos, permitiendo que iluminen en todas las direcciones. Tales focos omnidireccionales de tipo A son ideales para uso en lámparas.

IRC
¿Alguna vez te viste en una luz en la que el color de tu piel se veía distinto? El IRC de una lámpara, o su índice de reproducción cromática, te dice con cuánta precisión aparecen los colores bajo la luz de un foco. Varía entre 0 y 100. Las lámparas halógenas, una clase de focos incandescentes, tienen un IRC casi perfecto, de alrededor de 100. La mayoría de los LED y los CFL que hemos analizado tienen un IRC de 80 y pico, y unos pocos de 90 y un poco más.

Energy Star
Los focos que tienen la etiqueta de Energy Star están certificados en forma independiente para asegurarse de que cumplan con estándares altos. Las garantías deben ser más largas que las que normalmente existen en la industria (al menos 3 años para los LED y 2 para los CFK) y la etiqueta podría ayudarte a conseguir devoluciones de tu compañía de electricidad, así que ingresa a energystar. gov/rebate-finder.

Sin mercurio
Eso es cierto para todos los LED. Los CFL sí contienen mercurio. Aunque la cantidad es pequeña y se ha reducido sustancialmente, los CFL deben ser reciclados para impedir la liberación de mercurio al medio ambiente cuando se rompen los focos en la basura o en un tiradero. Si un CFL se rompe en tu casa, sigue los consejos de limpieza de la Agencia de Protección Ambienta (EPA) en www2.epa.gov/cfl/cleaning-broken-cfl.

Aviso
Lighting Science, un fabricante de LED, ha agregado una advertencia en sus cajas que dice “La exposición a ciertas luces eléctricas puede provocar efectos biológicos, algunos potencialmente disruptivos”. Eso provoca temor, es confuso y es una forma de vender focos LED con menos luz azul. Los estudios han demostrado que la exposición a cualquier luz por la noche está asociada a un aumento de problemas para dormir, y los ojos son especialmente sensibles a la luz azul, emitida más por los LED. Las lámparas con un color de luz de alrededor de 2700 kelvin son una mejor opción.

Esa es la reducción del precio actual de los LED de mayor calificación (reemplazo de 60 vatios), en comparación con los LED de mayor calificación de hace solo cuatro años.

Divide y vencerás
Los PAR y los BR, las focos utilizados en dispositivos de iluminación empotrados o reflectores, tienen un número como 30 o 64 en su descripción. Divídelo por 8 para saber el diámetro de la lámpara en pulgadas. Necesitarás ese número cuando elijas lámparas para tus dispositivos.

Considera el atenuador
La mayoría de los LED son atenuables, pero algunos parpadean y hacen ruido cuando se atenúan. Mejora la compatibilidad utilizando un atenuador recomendado por el fabricante de LED, generalmente indicado en su página web.

Encuentra el equivalente perfecto
No salgas de tu casa sin tu foco viejo. Es una manera segura de saber que el LED cabe en tu dispositivo, porque algunos son más grandes o más pesados que otros tipos de focos.

Utilízalos de la manera prevista
Si un LED se utiliza en un dispositivo cerrado pero no fue diseñado para eso, la lámpara puede recalentarse y empezar a atenuarse, el color de la luz puede cambiar o puede fallar antes de lo esperado. Indicamos en las Calificaciones los LED que, según los fabricantes, pueden utilizarse en dispositivos cerrados. Muchos de los LED y CFL analizados pueden funcionar al aire libre, pero deben protegerse del agua, así que revisa la caja.

Tipos separados
No utilices tanto CFL como LED en el mismo dispositivo si una lámpara lleva varios focos y tiene un atenuador. Eso puede afectar la interacción entre los focos y el atenuador, provocando parpadeo e intermitencia.

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