El repentino y continuo aumento en los precios de los medicamentos de venta con receta no muestra señales de detenerse.
La evidencia más reciente: El Instituto de Política Pública de AARP (Public Policy Institute) acaba de publicar un informe que indica que los precios minoristas para los medicamentos de venta con receta de marca, ampliamente usados, aumentaron 15.5% en 2015, el cuarto año consecutivo de aumentos de dos dígitos. Los precios minoristas de los 268 medicamentos de venta con receta de marca analizados en el estudio aumentaron 97%.
Los datos rastrean la cantidad facturada a tu plan de seguro médico, no los costos de tu bolsillo que pagas por los medicamentos de venta con receta en una farmacia. Pero a medida que las compañías aseguradoras enfrentan mayores precios de los medicamentos, estos costos están siendo transferidos a los consumidores a través de primas, copagos y coseguros más altos (el porcentaje que pagas del costo del medicamento), dice Leigh Purvis, director de investigación de servicios de salud para el Instituto de políticas públicas de AARP y coautor del informe.
El aumento es doloroso especialmente para la creciente cantidad de personas inscritas en planes con deducible alto. Ellos usualmente pagan el costo total de los medicamentos de venta con receta antes de alcanzar su deducible y antes de que el seguro empiece a cubrir una parte de las facturas. Más de un cuarto de los trabajadores asegurados tienen planes de salud de deducible alto con un promedio de $2,295 para la cobertura individual, de acuerdo con Kaiser Family Foundation.
Una encuesta telefónica representativa en toda la nación realizada en marzo por Consumer Reports Best Buy Drugs descubrió que 3 de cada 10 estadounidenses (aproximadamente 32 millones de personas) se vieron afectados con las alzas de los precios en los 12 meses anteriores, con un costo promedio de $63 más por un medicamento que toman de manera rutinaria, y algunos pagaron $500 o más.
“Incluso si los pacientes son lo suficientemente afortunados de tener buena cobertura de atención médica, los altos costos de los medicamentos de venta con receta se traducen en mayores costos de desembolso directo”, dice Purvis.
Cómo reducir tus costos de medicamentos
Aunque hay poco que los consumidores puedan hacer para controlar las fuerzas que causan el aumento de los precios de los medicamentos, puedes realizar estas acciones recomendadas por Consumer Reports Best Buy Drugs para disminuir tus propios costos de medicamentos de venta con receta.
Habla con tu médico. Por lo general, a los pacientes no se les ocurre hablar sobre el costo de sus medicinas con su médico. Pero las investigaciones demuestran que cuando lo hacen, los médicos pueden proporcionarles alternativas menos costosas. Pregunta acerca de las alternativas menos costosas, tales como medicamentos genéricos, los cuales pueden costar hasta 90% menos que los medicamentos de marca. Tu médico también podría considerar una sustitución terapéutica de un medicamento menos costoso que funcione igual de bien. Si tu compañía aseguradora baja o reduce la cobertura para un medicamento específico, pídele a tu médico que presente una apelación para obtener una excepción.
Considera no usar tu seguro médico. En algunas circunstancias podrás encontrar un medicamento con precio más bajo que el copago de tu seguro, así que ahorrarás evitando usar el seguro y comprarlo directamente. Los compradores secretos de CR Best Buy Drugs han descubierto precios minoristas en Costco que de manera consistente son los más bajos entre las cadenas de tiendas. No tienes que ser miembro para usar esta farmacia, aunque inscribirte puede ayudarte a recibir más descuentos. Además, no olvides tus farmacias independientes que hay en tu vecindario; estas pueden ofrecer precios aún más bajos que los de Costco.
Prueba un programa de medicamentos genéricos con descuento de $4/$10. La mayoría de las cadenas de tiendas y tiendas grandes ofrecen cientos de genéricos comunes a precios tan bajos como $4 por un suministro para 30 días y $10 por un suministro para 90 días para las personas que pagan de su propio bolsillo. Sam’s Club incluso surte gratis algunos medicamentos de venta con receta para los miembros. Revisa la letra pequeña: Es posible que haya un pequeño cargo por la inscripción, y no todos los programas de descuentos están disponibles para las personas con Medicare, Medicaid o seguro militar de Tricare. Además, ten en cuenta que cuando eliges no usar tu seguro, el dinero gastado en tus medicamentos no contará para tu máximo de desembolso directo o deducible.
Pide una receta médica para 90 días. Para los medicamentos que tomas a largo plazo puede ser más conveniente e incluso más barato. Por ejemplo, si usas tu seguro, pagarás un copago en lugar de tres. Y para los programas de medicamentos genéricos con descuento, pagar $10 por un suministro para 90 días sale a menos de $4 cada 30 días.
Busca en línea. Si estás pagando a través de desembolso directo, revisa GoodRx para conocer su “precio justo” y usa eso para negociar si un farmacéutico te cotiza un precio más alto. También puedes surtir un medicamento de venta con receta en una farmacia en línea, como HealthWarehouse.com. Solo debes tener cuidado de cuál eliges. Usa solo una farmacia minorista en línea que claramente opere dentro de los Estados Unidos y que muestre el símbolo de VIPPS para indicar que es un Sitio verificado de práctica de farmacia por Internet. La mayoría de los sitios que se denominan a ellos mismos como canadienses en realidad son fachadas de tiendas que venden productos de baja calidad o falsificados.
Elige un plan que cubra los medicamentos que necesitas. Compara los planes durante el período de inscripción abierta para tu seguro (usualmente en el otoño), ya que la cobertura podría cambiar de un año a otro. Ten en cuenta que los planes con deducible alto tienen primas más bajas, pero requieren que pagues una mayor parte de los costos de tus medicamentos.
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